El Premio Nobel de Química se concedió por logros sobresalientes en la investigación de la estructura de las proteínas. Los galardonados fueron el científico estadounidense David Baker y los investigadores británicos John Jumper y Demis Hassabis por su contribución al «desentrañamiento del código de las estructuras proteicas». David Baker fue reconocido por idear métodos para crear tipos completamente nuevos de proteínas, un logro que los científicos habían considerado casi imposible. Estas nuevas técnicas se han aprovechado para abrir nuevos horizontes en bioquímica y medicina.
Por otro lado, John Jumper y Demis Hassabis desarrollaron un avanzado modelo de inteligencia artificial para predecir las complejas estructuras de las proteínas. La base de esta red neuronal se puso en marcha en 2020 y representa un gran avance en la modelización computacional. Tiene amplias aplicaciones en áreas como la farmacéutica y la biotecnología.
De este modo, la investigación de David Baker en 2003 y el desarrollo británico de redes neuronales son las piedras angulares en la comprensión y aplicación de la ciencia de las proteínas. Estos nuevos avances profundizarán nuestra comprensión de los procesos biológicos a nivel molecular y abrirán nuevas perspectivas para el desarrollo de fármacos y terapias.
El Premio Nobel de Física recayó en el científico estadounidense John Hopfield y el investigador británico Geoffrey Hinton por sus destacados trabajos en aprendizaje automático. A John Hopfield se le atribuye la invención de una red neuronal asociativa capaz de reconstruir imágenes enteras a partir de versiones parciales, rotas o corrompidas de otro modo. Esta tecnología ha desarrollado una amplia investigación sobre cómo el cerebro procesa la información y reconstruye los recuerdos.
Mientras que Geoffrey Hinton recibió el mismo prestigio por crear una red neuronal recurrente que ayudó enormemente a reconocer y analizar elementos específicos en imágenes y secuencias de datos, su trabajo durante esa época ha servido de columna vertebral de los métodos modernos de procesamiento del lenguaje natural y de los de visión por ordenador.
Sus trabajos de los años ochenta fueron fundamentales para todo el auge reciente de la IA, tanto en el plano tecnológico como en el conceptual, y sirvieron de base para diversas direcciones de desarrollo en este campo. Estos logros no sólo atestiguaron el gran papel de la investigación teórica en física básica y ciencias de la computación, sino que también subrayaron la fuerza de un enfoque interdisciplinar del descubrimiento científico.